Productos
Nuestras comidas deshidratadas conservan los macronutrientes y gran parte de los micronutrientes y se preparan de acuerdo con las directrices de la Organización Mundial de la Salud. Creamos menús que respetan las tradiciones culinarias de cada región, lo que permite personalizar las recetas con ingredientes naturales y ajustes nutricionales en función de las necesidades específicas.
La deshidratación es el método más antiguo de la humanidad para conservar los alimentos. Nuestra técnica no utiliza conservantes ni aditivos perjudiciales para la salud, como los que se emplean en los alimentos ultraprocesados que se encuentran en los estantes.
En contraste con el enfoque generalmente asociado a la industria alimentaria ultraprocesada, nuestras comidas están cuidadosamente diseñadas, fomentando la agricultura familiar y la inclusión social.
SOLUCIONES
Simple y fácil
de preparar.
Descubre nuestra gama de soluciones.
Risotto
Mezcla de arroz con proteínas animales y verduras, enriquecida con vitaminas y minerales. Opciones de proteína animal con carne o pollo).
Sopa
Mezcla para preparar sopa de fideos con proteínas animales y verduras, enriquecida con vitaminas y minerales (opciones de proteínas animales con carne o pollo).
Papilla
Mezcla para hacer gachas de maíz con coco, enriquecida con vitaminas y minerales.
Picadillo
Picadillo de patata con proteínas animales y vegetales, verduras, enriquecido con vitaminas y minerales.
BENEFICIOS
Diferenciadores de nuestras soluciones
Preservación de nutrientes
Los alimentos deshidratados conservan los macronutrientes durante el proceso de deshidratación, asegurando un apoyo nutricional adecuado para quienes se encuentran en situaciones de emergencia.
Mejor durabilidad y almacenamiento
La deshidratación prolonga la vida útil de los alimentos, lo que los convierte en una opción práctica para situaciones en las que es necesario un almacenamiento prolongado y las condiciones de refrigeración son limitadas o inexistentes.
Peso y volumen reducidos.
Los alimentos deshidratados son livianos y compactos, lo que permite transportar y distribuir eficientemente grandes cantidades en lugares remotos o afectados por desastres.
Aporte calórico adecuado
En situaciones de crisis, es fundamental aportar suficientes calorías para mantener la energía y la salud de los afectados. Los alimentos deshidratados suelen tener una mayor densidad calórica, lo que puede ser vital para la supervivencia.
Fácil preparación
Los alimentos deshidratados requieren poca o ninguna preparación adicional, ahorrando tiempo, recursos y necesidad de utensilios de cocina.
Diversidad de opciones
Los alimentos deshidratados pueden producirse con una variedad de ingredientes, permitiendo satisfacer las necesidades nutricionales específicas de diferentes grupos de población.
Respuesta rápida
La producción a gran escala de alimentos deshidratados permite una respuesta rápida y eficaz a las emergencias, garantizando que la ayuda alimentaria llegue a las personas necesitadas lo más rápido posible.
Aceptación cultural
En algunas culturas, los alimentos deshidratados pueden formar parte de la dieta tradicional, facilitando su aceptación e incorporación a la dieta de las comunidades afectadas.
Reducción de desperdicios
Los alimentos deshidratados tienen una vida útil prolongada, minimizando el desperdicio de alimentos que podría ocurrir con los productos perecederos.
Instalaciones
Con más de dos décadas de experiencia, nuestra producción se centra en la eficacia nutricional. Certificados por los principales organismos reguladores mundiales, seguimos las normas más exigentes, de acuerdo con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.
